El sábado 6 de junio salió el artículo que escribió sobre mi Constanza Gutierrez en la sección de Tendencias de La Tercera :D Lo pueden leer completo aquí! Coni este año escribió su primer libro, “Incompetentes“, búsquenlo y léanlo, está muy bueno.

Vamos a una prueba de cámara

por Constanza Gutiérrez

Es temprano por la mañana y voy, junto a Isabella Cuevas (13) y su mamá y mánager, Dana Hermosilla, en un auto camino a la prueba de cámara para un programa de televisión de Zona Latina que aún no existe. Dana me explica que el productor del programa le pidió a Isabella que hablara sobre ídolos juveniles, y que lo hará de Miley Cyrus. Es sólo una prueba, pero Isabella se lo toma en serio y repite concienzudamente lo que quiere decir. Se trata de un listado de cosas que reflejan el cambio radical que ha tenido la cantante pop en los últimos años: la imagen, la música, la hipersexualización de sus shows y la fundación con la que ayuda a jóvenes que viven en la calle, Happy Hippie. Repite. Y de nuevo, cada vez con más detalles: el corte de pelo, sus covers de los Beatles o Dolly Parton, el trabajo que hace con la fundación. Su mamá imposta la voz y hace una presentación, simulando ser la animadora e Isabella se larga a hablar.

Desde que empezó su blog Deisabella.com, a los diez años, Isabella viene escribiendo sobre sus experiencias, gustos y disgustos casi semanalmente. “Era muy buena en matemáticas, pero no mucho para escribir, así que le propuse que empezara un blog”. Podría haberse mantenido así, como cualquier blog preadolescente, pero empezó a destacarse por las fotos donde mostraba la ropa que elegía para cada ocasión y empezó a ganar seguidoras. Primero sus amigas y compañeras de curso, luego niñas de su edad que no conocía. Luego Adidas la eligió, de entre todas las blogueras nacionales, para representarlas en un concurso mundial.

“Me mandaron una caja con ropa diseñada por Selena Gómez para ellos y yo tenía que combinarla con la mía y mandarle las fotos a un jurado internacional. Competí con bloggers de países donde están mucho más avanzados en moda que Chile y llegué a la final con una niña de Japón”, explica Isabella, que está en octavo básico y tuvo que pedir permiso para faltar a clases y viajar a NYC

Un día, Adidas la invitó a su oficina. “Me dijeron que me querían regalar una ropa”. Le preguntaron si creía que podía ganar, e Isabella dijo que sí, pero cuando le mostraron una gigantografía del pasaje de avión que la llevaría a Nueva York, se puso a llorar. Ganar lo cambió todo. Los paseos infantiles y campamentos scout empezaron a intercalarse con las actividades de este nuevo trabajo: desde la reunión con Selena Gómez, la aparición en Bienvenidos, de Canal 13 y varios eventos para marcas ropa, hasta el reciente Santiago Fashion Week, al que Isabella asistió con tenidas de dos destacados diseñadores de moda nacionales, Nicanor Bravo y Matías Hernán, que se ofrecieron a vestirla.

Al llegar al canal hay cierta confusión con el nombre del productor del programa. Dana dice uno, el portero dice otro. Nos quedamos un rato ahí, paradas junto al auto, mientras algunas estrellas juveniles que sólo Isabella reconoce (y mira con curiosidad) entran y salen del canal. El auto tiene una capa de polvo que forma una trama. “Mira, qué choro, es como un animal print”, me dice Isabella, esperando que sea su mamá quien la escuche. Entonces sale el productor del programa, nos saluda y nos hace pasar.

El productor le dice que no se ponga nerviosa porque es un programa piloto. “Queremos ver cómo te manejas con las cámaras, así que incluso puedes inventar alguna respuesta y da lo mismo: esto no saldrá”.  Le pregunta qué tiene pensado decir y repasamos de nuevo: el corte de pelo, los shows… nada más. “Mejor no hables de su fundación porque no tenemos apoyo visual para eso”, le pide. Isabella asiente.

Aún cuando ya se ha profesionalizado, el blog de Isabella sigue siendo escrito por ella. Se nota en los temas, en las observaciones y también en la redacción: todo esto pertenece, evidentemente, a una niña de 13. No se queda despierta hasta tarde los días de semana, no escribe para captar más marcas, no espera aprobación. Hace poco, bajo una foto del Santiago Fashion Week, una niña posteó en el Instagram de Isabella que su peinado le parecía feo y que no iba con ella. “Creo que debiste decir ‘creo que ese peinado no va con la idea que tengo yo de tu estilo’ porque… ¿quién más que solo yo sabe qué va realmente conmigo? Un beso”, le respondió Isabella. Ella aún elige su ropa, aún va a scout, aún postea sobre sus vacaciones en familia y sus actividades escolares. Y eso es lo que quieren las marcas que la buscan (Huawei, Hatsu, MAC Cosmetics, Index): la descripción fresca de una niña, no una pequeña estrella.

Después de que la maquillan, Isabella entra al set. Bajan las luces y empieza la música; la animadora, Jessica Abudinen, enumera los temas de los que hablará: actualidad, la historia del bikini y la ídola juvenil Miley Cyrus. Isabella y Daniela repasan una vez más. Pero el programa es más improvisado, y su preparada disertación sobre Miley se convierte en una serie de respuestas cortas a las preguntas que le hacen. Sale airosa, pero no tiene tiempo para decir lo que tenía pensado. Las preguntas se alejan de Miley, se vuelven más personales y luego sobre moda.

Al terminar, la animadora se despide rápido y se va corriendo. El productor agradece  y nos acompaña afuera. Ya no hay nada que ensayar, Isabella se sienta en el asiento del copiloto y revisa su celular.

- Oye, Isa, ¿Y qué opinas de Miley Cyrus? -le pregunto, para terminar.

- Mmm… que por fin puede ser ella misma.